CONSTA DE 6
VOLÚMENES (páginas:
XX+430+437+394+416+464+420).
Cuando nos
hicimos cargo de la dirección de SUMA Julio Sancho
y el que esto escribe y pensamos en el diseño de
sus diferentes secciones, veíamos claro que una de
ellas debía consistir en recensiones de libros y
material didáctico que fuesen apareciendo en el
mercado editorial, lo cual no era nada original
pues es una de las secciones habituales
-obligatoria, más bien- en todas las revistas del
tipo de la nuestra. Se nos ocurrió iniciar esta
sección en cada número con una reseña «larga» de
una obra que sin ser novedad, hubiese tenido,
desde nuestro punto de vista, una cierta
significación en la enseñanza de las matemáticas o
en su divulgación o en la formación de los
profesores. Así, han ido apareciendo en estas
páginas trabajos sobre libros de Rey Pastor, Puig
Adam, Polya, Freudhental, Klein... Nosotros mismos
nos comprometimos a hacer una de ellas; Julio
cumplió su compromiso con el magnífico libro ¿Qué
es la matemática? de Courant y Robbins y yo, por
razones personales, pensé siempre en Sigma. Dos
cosas bastante obvias, aunque a veces se olvidan:
la primera, un profesor de matemáticas de
secundaria debe «saber matemáticas»; y la segunda,
este «saber matemáticas» no es suficiente para ser
un buen profesional en la enseñanza de la materia,
es preciso un conocimiento apreciable de diversas
disciplinas englobadas en lo que se denomina
ciencias de la educación (psicología, sociología
educativa, teoría del currículo, etc.), además,
por supuesto, de unas ciertas dotes personales que
haga que el clima de clase
funcione. Centrémonos en el «saber
matemáticas». ¿Qué y cuántas matemáticas debe
conocer un profesor de secundaria?, ¿son
suficientes los contenidos matemáticos que se
adquieren a lo largo de una licenciatura en
matemáticas? Rotundamente, sí, Sin embargo, hay
una serie de aspectos de lo que podríamos llamar
«cultura matemática» que normalmente no se
adquieren en los estudios universitarios. Me estoy
refiriendo a cuestiones de historia de la
matemática, de epistemología, de relaciones de la
matemática con otras ciencias o con el arte o la
música; y también a una visión de conjunto sobre
lo qué es la matemática y sus diversas partes. De
alguna forma se trataría de un humanismo de las
matemáticas dentro de las mismas matemáticas y en
sus relaciones con otros aspectos de la cultura y
de la vida. En los últimos años el mercado
editorial español ha sacado a la luz muchos
títulos que cumplen perfectamente esta visión de
las matemáticas, pero hace treinta años la escasez
de libros en español de estos temas era
considerable; sólo algunos de la antigua Labor
-recuérdense los de Colerus-, otros de la
entrañable colección Austral -sobre todo de
historia de la matemática y cuatro sensacionales
de Poincaré-, alguno importado de México y
Argentina y... poco más. Por eso, cuando
Grijalbo comenzó a publicar en 1968 los tomos de
El Mundo de las Matemáticas, fue muy bien recibido
por todos aquellos que entonces intuíamos lo dicho
más arriba: lo estudiado en la carrera resultaba
insuficiente, era preciso complementarlo con
lecturas matemáticas de un tipo distinto al de los
manuales universitarios al uso. Personalmente
recuerdo que estaba estudiando cuarto y tuve que
dejar el «Ducados» y pasarme al «Celtas», pues las
trescientas pesetas que había que desembolsar cada
dos o tres meses (era la frecuencia con la que
aparecía cada volumen) era ciertamente gravoso;
quizás por ello Sigma es, para mí, una de las
obras más queridas de mi modesta
biblioteca.
Sigma. El Mundo de las
Matemáticas es una recopilación de más de un
centenar de ensayos (133 exactamente) recopilados
por James R. Newman cuya edición original data de
1956 con el título original The World of
Mathematics, aun cuando inicialmente, y según el
propio Newman, estaba previsto para
1942. Newman no sólo hace la recopilación de
estos textos, sino que los introduce a través de
comentarios, que por sí solos poseen un gran
valor.
Los prólogos La versión de
Sigma que estamos manejando dispone de tres
prólogos de las correspondientes ediciones
norteamericana, sueca y española. En ellos se
muestra claramente cuál es el propósito de la
obra. El prólogo de la edición norteamericana
se debe a su recopilador James R. Newman. Además
de los agradecimientos de rigor, describe las
dificultades que tuvo para llevar a cabo esta
empresa y cómo el trabajo que esperaba acabar en
dos años le llevó casi veinte. Según él, ha
seleccionado:
...lo que mejor muestre el
campo de las matemáticas, la riqueza de sus ideas
y la multiplicidad de sus aspectos. Presento las
matemáticas como una herramienta, un lenguaje y un
mapa; como una obra de arte y un fin en sí mismos;
como un resultado de la pasión por la perfección.
Aparecen como objeto de ironías, tema para el
humor y fuente de controversias; como un estimulo
para la imaginación, un fermento para los
narradores; como algo que ha llevado a los hombres
al frenesí y que les proporciona
deleite.
También indica sus preferencias
personales que, por supuesto, tienen un reflejo en
la selección:
Una antología es una obra de
prejuicios. Esto no es menos cierto en una obra de
matemáticas que cuando se trata de poesía o
ficción. Los cuadrados mágicos, por ejemplo, me
aburren; en cambio, nunca me cansaría de la teoría
de probabilidades. Prefiero la geometría al
álgebra, la física a la química, la lógica a la
economía, las matemáticas del infinito a la teoría
de números. Hay tópicos que rehuyo, algunos que
trato ligeramente y otros que acojo con la mayor
benevolencia. [...]
Tord Hall presenta la
edición sueca, que es la que se ha seguido en
cuanto a organización de los textos en la edición
española. Hall habla en su presentación de la
dificultad de la obra:
... Newman no
intenta saltar las dificultades. Por el contrario,
utiliza todas las dimensiones del registro de las
matemáticas. Los artículos elegidos tienen, pues,
dificultades en grados diversos: desde la parte
literaria, donde el elemento matemático apenas se
percibe, sube lentamente la curva, pasando por los
resúmenes históricos y biográficos, o las
orientaciones de tipo más general, para culminar
en los artículos sobre, por ejemplo, la teoría de
la relatividad, o sobre lógica matemática. En una
serie como ésta se encuentran muchos ensayos que
no requieren ninguna preparación especial. Estos
pueden servir como punto de partida para seguir
adelante con estudios que nos enseñan a comprender
el cambiante ser de las matemáticas: un medio y
una meta, un instrumento para la técnica y un
bello arte, independiente de la
realidad.
La presentación de la edición
española corre a cargo de Manuel Sacristán, que
muy bien podría haber pasado a formar parte del
cuerpo de la obra, pues no se limita a describir
lo que el lector se va a encontrar en las páginas
siguientes, sino que con unas breves pinceladas
señala los problemas que puede acarrear una
interpretación equivocada de la matematización de
las ciencias de la sociedad. Sacristán termina
su prólogo con estas palabras:
... La
historicidad de la matemática misma se revela en
esta antología al lector atento por la vía más
viva, fecunda y gustosa: por la lectura de los
textos clásicos que han dado origen a los
principales giros del pensamiento matemático.
James R, Newman tenía títulos y autoridad para
llevar a cabo una empresa de esta calidad y de
estas dimensiones (mucho mayores aún en
perspectivas que en páginas). La exposición a la
vez seria y educativa o elemental de ternos
matemáticos profundos no es un arte en el que
tuviera que ponerse a prueba por vez primera. Ya
hace años publicó, en colaboración con el lógico
E. Nagel, una exposición didáctica del teorema de
Gödel que es una pieza clásica de divulgación.
Esta antología no se queda a la zaga de aquel
texto.
Para empezar...
historia
El volumen inicial está
dedicado a la historia de las matemáticas y a un
último ensayo sobre la naturaleza de la
matemática.
Los estudios históricos
comienzan con una historia biográfica, Los grandes
matemáticos, de Turnbull que abarca desde los
griegos hasta el siglo XIX y pretende ser el marco
de referencia para las otras selecciones. Las
escasas cien páginas de este libro pueden
constituir un buen punto de partida para quienes
deseen iniciarse en historia de las matemáticas,
antes de pasar a obras de mayor envergadura (el
mismo papel lo pueden hacer las historias de
Babini, Rey Pastor, Colerus o Hoffmann).
El
resto de artículos de esta sección muestran
algunos momentos y figuras especialmente
relevantes de la matemática, en algunos casos por
medio de biografías como en los casos de Kepler,
Newton (se le dedican dos trabajos, como no podía
ser menos), Gauss, Cayley, Sylvester y el
sorprendente Ramanujan; en otros, se reproducen
textos originales como las primeras páginas de La
geometría de Descartes o un extracto del curioso
El Analista, donde el obispo Berkeley ataca sin
piedad a los infinitésimos «evanescentes» de
Newton. Especial relevancia tienen las páginas
autobiográficas de Bertrand Russel, que con el
título Mi desarrollo intelectual, son -en palabras
del propio Newman- «el comentario de uno de los
más grandes escritores actuales sobre uno de los
más importantes filósofos vivientes». El coautor,
con Russell, Whitehead, de los Principia
Mathematica cierra esta sec-ción con su ensayo
sobre La matemática como elemento en la
historia del pensamiento.
Philip E. B.
Jourdain es el autor único de la segunda sección
de este volumen con su ensayo La naturaleza de
la matemática. Él mismo señala en la
introducción su objetivo: La finalidad de este
pequeño volumen no es -como la de un libro de
texto- el dar una colección de métodos y ejemplos
matemáticos, sino, ante todo, la de decir lo que
no dan los libros de texto: una visión de cómo y
por qué se han originado esos métodos. Y
prosigue: En este libro no voy a prestar mucha
aten-ción a los detalles de la aritmética
elemental, la geometría y el álgebra que apare-cen
en la mayoría de los libros de texto, sino que
atenderé al estudio de aquellas nociones -como la
de número negativo- que se usan sin discusión
suficiente en dichos libros.
El mundo
físico
El carácter instrumental de las
matemáticas en las ciencias experimentales se pone
claramente de manifiesto en el segundo volumen de
Sigma, titulado las matemáticas y el mundo
físico. A Galileo (con una selección de sus
Diálogos referentes a dos nuevas ciencias) le
sigue Daniel Bernouilli con un breve extracto
sobre teoría cinética de los gases y de ahí se
pasa a la astronomía, con una historia sobre la
determinación de la longitud terrestre y otra
sobre el descubrimiento del planeta Neptuno en
1846. La Química está representada por
Mendeléief y su ley periódica de los elementos y
la Biología por las matemáticas de la herencia de
Mendel y la selección natural y teoría
evolutiva. Capítulos de la física, como la ley
de gravitación, teoría cuántica, el principio de
incertidumbre de Heisenberg, la mecánico
ondulatoria o la teoría de la relatividad
completan este volumen. Lógicamente, de todos
estos temas aparecen estrictos o aspectos
concretos, pues está claro que la teoría de la
relatividad, por ejemplo, no se puede despachar en
unas cuantas páginas.
Azar, estadística
y ciencias sociales
La sección dedicada
a la probabilidad comprende seis trabajos de
Laplace, Peirce, Keynes, Poincaré y Nagel, que
recogen las tres interpretaciones importantes de
la probabilidad, según Newman:
La opinión
clásica, formulado por Laplace y De Morgan,
sostiene que la noción se refiere a un estado de
ánimo. [...] Otro punto de vista define la
probabilidad como una relación lógica,
esencialmente imposible de analizar, pero
intuitivamente comprensible. [...] El tercer
criterio de la probabilidad radica en el concepto
estadístico de la frecuencia
relativa.
Personalmente me cautiva el
estilo claro y a la vez riguroso de las
divulgaciones de Poincaré. Su artículo El azar
(publicado con anterioridad en castellano en su
librito Ciencia y Método de la Colección Austral)
es una muestra excelente de ello. Sigma ofrece
dos artículos sobre estadísticas de vida debidos
al mercader John Graunt (que se considera de
alguna forma el iniciador de la estadística) y al
astrónomo Edmund Halley, que constituyen el punto
de partida de la creación de las compañías de
seguros. Sobre este tema, y también sobre juegos,
trata el entretenido El vicio del juego y la
virtud de asegurarse del no matemático Bernard
Shaw, que junto con otros ensayos, en general con
poco aparato técnico y de carácter muy
divulgativo, hacen que los textos de esta sección
sean especialmente aprovechables para la lectura y
posterior comentario en una clase de
secundaria. La última sección de este tercer
volumen está dedicada a las relaciones de las
matemáticas con algunas ciencias sociales:
psicología, demografía, economía, sociología... Si
Sigma se diseñase hoy, seguramente está sección
aparecería notablemente enriquecida con otras
aportaciones.
El meollo de la
cuestión
Aritmética y números,
geometría, grupos y las matemáticas del infinito
son las secciones del cuarto volumen. De acuerdo
con la cita que hemos hecho del prólogo de Newman,
aquí (y en el volumen siguiente) figurarían sus
preferencias matemáticas. La sección de números
comienza con Arquímedes y su Arenario. Paulos en
su librito El hombre anumérico señala que
los tópicos en los que se muestra el anumerismo en
nuestra sociedad son la probabilidad y los grandes
números. Éstos, en general, han sido poco tratados
en las matemáticas escolares y hasta la última
reforma no han sido introducidos en los
currículos, aunque tengo la sensación de que no
han llegado al aula con la importancia que creo
que tienen. El Arenario puede servir, con las
naturales adaptaciones, como un ejemplo entre
muchos para ese tratamiento. Arquímedes inicia
este trabajo planteando el
problema:
Algunos creen, rey Gelón, que
el número de los granos de arena es una cantidad
infinita: hablo no solamente de la que está
alrededor de Siracusa y de toda Sicilia, sino de
toda la tierra tanto habitada como deshabitada.
Hay algunos que no creen que sea infinito, sino
que no hay ningún número nombrado que supere esta
cantidad. [...] Yo sin embargo trataré de probarte
con demostraciones geométricas que puedas seguir,
que algunos de los números nombrados por mí y
explicados en los escritos dirigidos a Zeuxipo no
solamente superan al número de lo granos de arena
de una magnitud igual a la de la Tierra llena tal
como hemos dicho, sino de una magnitud igual a la
del cosmos.
En esta sección hay otros
artículos que pueden ser explotados didácticamente
con alumnos de secundaria, son los dos referidos a
la forma de contar y sistemas de numeración de
distintas civilizaciones (aunque el mismo papel lo
puede hacer uno de los libros de Ifrah, sobre las
cifras) y los dedicados a calculadores prodigio y
la capacidad de los pájaros para
«contar».
De otro carácter muy distinto son
los dos breves, pero magníficos, ensayos de
Dedekind y Bertrand Russell sobre los números
irracionales y el concepto de número,
respectivamente.
La geometría es el objeto
de la sección Matemáticas del espacio y del
movimiento. Clifford, en los tres primeros
artículos de esta sección, y Helmholz, al tratar
sobre el origen y la significación de los axiomas
geométricos, explican de forma muy clara el
nacimiento y el sentido de las geometrías no
euclideas, lo que proporciona un magnífico ejemplo
de la esencia de la matemática como modelo
axiomático-deductivo; ejemplo que,
convenientemente simplificado y sin tecnicismo
alguno, puede (y me atrevería a decir que debe)
ser introducido en clase de bachillerato. Resulta
sorprendente que una apreciable proporción de
recién titulados universitarios no hayan oído
hablar de las geometrías no euclideas.
La
memoria de Euler sobre el famoso problema de los
siete puentes de Königsberg y un capítulo del
excelente libro de Courants y Robbins, ¿Qué es la
Matemática?, y que ya ha sido comentado en esta
misma sección de SUMA, conforman la parte dedicada
a topología.
Las matemáticas en la obra de
Durero, un estudio de Morris Kline sobre geometría
proyectiva y un par de conferencias de Hermann
Weyl dedicadas a la simetría completan esta
sección geométrica que, en mi opinión, es una de
las más logradas de toda la obra que estamos
comentando.
Como modelo de abstracción
matemática, Newman se inclina por la teoría de
grupos: «La teoría de grupos -escribe- es el
máximo ejemplo del arte de la abstracción
matemática. Solamente se interesa por la sutil
filigrana de las relaciones fundamentales; es el
instrumento más poderoso inventado hasta ahora
para aclarar las estructuras», y selecciona dos
ensayos, uno de Keyser a pesar de que dice que «su
estilo es algo plúmbeo y pasado de moda» y otro
divulgativo de Eddington.
El volumen
termina dedicado al infinito; el polivalente
Bertrand Russell escribe sobre Los metafísicos y
las matemáticas, y el austriaco Hans Hahn describe
el trabajo del creador de la moderna teoría
matemática del infinito, Georg
Cantor.
Verdad,
lógica...
Hempel, Wilder, Nagel,
Peirce, Weyl, Boole, Tarski, Polya, Hardy,
Poincaré y Newman como jugador-entrenador, junto
con los reservas.. ¡vaya alineación! Esta
selección, individualmente o en parejas, trata de
responder a cuestiones como: ¿qué es la
matemática?, ¿cuáles son sus fundamentos?, ¿qué
estructura tiene?, ¿qué significa el teorema de
Gödel?, ¿cuál es la esencia de la matemática?,
¿hay un modo matemático de pensar?, ¿qué forma
presenta?, ¿qué relaciones existen entre
matemáticas y lógica?, ¿es importante lo absurdo
en matemáticas?, ¿qué pasa con las paradojas?, ¿se
puede aprender a resolver problemas?, ¿son bellas
las matemáticas?, ¿se puede hablar del arte de las
matemáticas?, ¿que es ser matemático?, ¿cómo se
hacen las matemáticas?, ¿qué sucede en el cerebro
de un matemático?... No diré nada más de este
volumen, únicamente la recomendación de
leerlo.
Un poco de todo
Una
obra preparada en 1956, hace más de cuarenta años,
tiene que notar el paso del tiempo y aunque
bastantes de las secciones se pueden leer hoy
perfectamente, hay alguno, como la que inicia el
volumen sexto, que es evidente que hoy Newman las
diseñaría de forma totalmente diferente. Son los
artículos referidos a calculadoras automáticas,
aunque existe uno de Turing cuya lectura resulta
interesante. La mayor parte de este volumen
está dedicado a relaciones entre matemáticas y
algunas ramas de las humanidades, así como a lo
que se ha dado en llamar matemática recreativa. En
sendos artículos Birkhoff pretende trazar
programas racionales para codificar los ámbitos
estético y... ético (¡casi nada!):
El
programa implica la introducción de ideas
cuantitativas elementales basadas en una simple
fórmula de «cuantía ética», con el fin de
clasificar y codificar el vasto ámbito de la
ética. Cabe esperar que tal programa pueda
desempeñar la misma clase de servicio útil para la
ética que el desempeñado por la lógica para las
matemáticas y por la gramática para el
lenguaje.
Más interesantes, al menos más
entretenidos, son los cinco relatos de la sección
las matemáticas en la literatura: un extracto del
Viaje o Laputa, de los Viajes de Gulliver, de
Jonathan Swift, en el que se ridiculiza a las
matemáticas y a quienes las cultivan; una novela
corta de Huxley; Geometría en el Sur del Pacífico;
y un par de relatos fantásticos con la estadística
como eje inspirador de las historias. Hoy, Newman
hubiese dispuesto de relatos con más fuerza para
añadir a esta selección; un solo ejemplo,
Borges. Las matemáticas como clave cultural es
la sección que promete más de lo que da: un
¿ensayo? sobre el significado de los números y
otro que consiste en una referencia antropológica
sobre si las verdades matemáticas residen en el
mundo externo o son invenciones del hombre. La
última sección de este sexto volumen -en mi
opinión el más flojo de los seis- está conformado
por una decena de trabajos de matemática
recreativa: paradojas, pasatiempos, juegos,
reconstrucciones aritméticas, cuadrados mágicos,
problemas curiosos, etc. Está bien, pero se echa
en falta un nombre que ya publicaba en aquella
época: -Martin Gardner.
Para
finalizar...
...tengo que seguir
escribiendo algo más, pues no quedaría bien acabar
con la último frase del apartado anterior y me
gustaría, además, acabar la página, por aquello de
la maquetación. Y voy a hacerlo con una
justificación y una recomendación.
Ya sé
que la justificación es un recurso literario muy
cómodo, pero aún así lo haré. Desde el momento en
que decidí escribir estas pocas páginas fui
consciente de que no me era posible hacer un
comentario, aunque sólo fuese medio profundo, por
falta de conocimientos, capacidad, tiempo,
extensión... ¡Haría falta ser otro Newman! Sin
embargo, es una obra tan querida por mí, me ayudó
tanto en mi formación matemática y en mis primeros
años de ejercicio profesional que no he querido
dejar pasar la ocasión de hacer en SUMA este
pequeño homenaje a SIGMA (¡qué casualidad: suma y
sigma!). Entiéndase pues así, más como un homenaje
que como una recensión. ¡Ah!, me falta la
recomendación y de esta forma termino. Por favor,
si no lo han hecho ya, léanlo o, al menos,
hojéenlo.
Volumen primero 1.
Historia y biografías Los grandes
matemáticos (Herbert Westren Turnbull);El papiro
Rhind (James R. Newrnan); Arquímedes (Plutarco,
Vitruvio y Tzetzes); Matematicos griegos (Ivor
Thomas);Declaración sobre la utilidad de la
aritmética (Robert Recorde); Johann Kepler (Sir
Oliver Lodge); La Geometría (René Descartes);
Isaac Newton (E. N, da Andrade); Newton, el hombre
(John Maynard Keynes); El analista (El Obispo
Berkeley); Gauss, el príncipe de los matemáticos
(Eric Temple Bell), Gemelos invariables, Cayley y
Sylvester (E. Temple Bell); Srinivasa Ramanujan
(James R. Newman); Mi desarrollo intelectual
(Bertrand Russell); La matemática como elemento en
la historia del pensamiento (Alfred North
Whitehead). 2. Estudio general La
naturaleza de la matemática (Philip E. B.
Jourdain).
Volumen segundo 1.
Las matemáticas y el mundo físico La
matemática del movimiento (Galileo Galilei); Teona
cinética de los gases (Daniel Bernoulli); La
longitud (Lloyd A. Brown); John Couch Adams y el
descubrimiento de Neptuno (Sir Harold Spencer
Jorres); Números atómicos (H. (S J. Moseley); Los
rayos Röntgen (William Bragg); Los cristales y el
futuro de la física (Philippe Le Corbeiller); ¿Que
es el cálculo de variaciones y cuáles son sus
apli-caciones? (Karl Menger); Las burbujas de
jabón (C Vernon Boys); El problema de Plateau
(Richard Courant y Herbert Robbins) ; Ley
periódica de los elementos químicos (Dmitri
Mendeleief); Mendeléief (Bernard Jaffe);
Matemáticas de la herencia (Gregor Mendel); El
tamaño adecuado (J. B. S. Haldane); Matemática de
la selección natural (J. B. S. Haldane); La
herencia y la teoría cuántica (Erwin Schrödinger);
Sobre la magnitud (D'Arcy Wentworth Thompson); El
principio de incertidumbre (Werner Heisenberg);
Causalidad y mecánica ondulatoria (E.
Schródinger); Las constantes de la Naturaleza (Sir
Arthur Stanley Eddington); La nueva ley de la
gravitación y la ley antigua (Sir Arthur Stanley
Eddington); La teoría de la Relatividad (Clement
V. Dureli).
Volumen tercero 1.
Las leyes de la probabilidad Sobre la
probabilidad (Pierre Simon de Laplace); Las rojas
y las negras (Charles Sanders Peirce); La
probabilidad de la inducción (Charles Sanders
Peirce); La aplicación de la probabilidad al
comportamiento (John Maynard Keynes); El azar
(Henry Poincaré); Significado de la probabilidad
(Ernest Nagel). 2. Las estadísticas y la
programación de los
experimentos Fundamentos de las
estadísticas de vida (John Graunt); Las primeras
tablas de seguros de vida (Edmund Halley); La ley
de los grandes números (Jacob Bernouilli);
Muestreo y desviación tipo (L. C. Tippett);
Promedio y dispersión (M. J. Moroney); Las
matemáticas de una catadora de té (Sir Ronald A
Físher); El vicio del juego y la virtud de
asegurarse (George Bernard Shaw). 3.
Matemáticas y Ciencias Sociales Gustav
Theodor Fechner (Edwin G. Boring); Clasificación
de los hombres según sus dotes naturales (Sir
Francis Galton); Las matemáticas de los alimentos
y de la población (Thomas Robert Malthus);
Matemáticas del valor y la demanda (Augustin
Cournot); Teoría de la economía política (William
Stanley Jevons); Las matemáticas de la guerra y la
política internacional (Lewis Fry Richardson);
Estadística de los conflictos bélicos (Lewis Fry
Richardson); Teoría del comportamiento económico
(Leonid Hurwicz); Teoría de los juegos (S. Vajda);
La sociología aprende el lenguaje de las
matemáticas (Abraltam Kaplan).
Volumen
cuarto 1. Aritmética, números y arte de
contar Arenario (Arquímedes); Contar (Levi
Leonard Conant); De los números a los numerales y
de los numerales al cálculo (David Eugene Smith y
Jekuthiel Ginsburg); Calculadores prodigio (W. W.
Rouse Ball); La capacidad de los pájaros para
«contar» (O. Koehler); La reina de las matemáticas
(Eric Temple Bell); Sobre el teorema del binomio
para exponentes frac-cionarios y negativos (Isaac
Newton); Números irracionales (Richard Dedekind);
Definición de número (Bertrand Russell). 2.
Matemáticas del espacio y del movimiento La
exactitud de las leves matemáticas (William
Kingdon Clifford); Postulados de la ciencia del
espacio (W Kingdon Clifford); Teoría de la matera
en el espacio (W.Kingdon Clifford); Los siete
puentes de Königsberg (Leonhard Euler); Topología
(Richard Courant y Herbert Robbins); Durero como
matemático (Erwin Panofsky); Geometría proyectiva
(Morras Kline); Sobre el origen y la significación
de los axiomas geométricos (Hermann von
Helrnholtz); Simetría (Hermann Wevl). 3. El
arte supremo de la abstracción: teoría de
grupos El concepto de grupo (Cassius _J.
Keyser); La teoría de grupos (Sir Arthur Stanley
Eddington). 4. Las matemáticas del
infinito Los metafísicos y las matemáticas
(Bertrand Russeil); El infinito (Hans
Hahn).
Volumen quinto 1. La
verdad matemática y la estructura de las
matemáticas Sobre la naturaleza de la
verdad matemática (Carl G Hempel); La geometría y
la ciencia empírica (Carl G. Hempel); El método
axiomático (Raymond L. Wilder); La demostración de
Gödel (Ernest Nagel y James R. Newman); Una
ciencia matemática (Oswald Veblen y J. Wesley
Young); La matemática y el mundo (Douglas
Gasking); Los postulados matemáticos y el
entendimiento humano (Richard von Mises). 2.
Forma del pensamiento matemático El estudio
que no sabe nada de la observación (James Joseph
Sylvester); La esencia de la matemática (Charles
Sanders Peirce); La economía de la ciencia (Ernst
Mach); Medición (Norman Robert Camphell); Las
leyes numéricas y el uso de las matemáticas en la
ciencia (Norman Roben Campbell); El modo
matemático de pensar (Hermann Weyl). 3.
Matemática y lógica Análisis matemático de
la lógica (George Boole); Historia de la lógica
simbólica (Clarence Irving Lewis y Cooper Harold
Langsford); La notación simbólica, los ojos de
Haddock y la ordenanza sobre los perros (Ernest
Nagel); Lógica simbólica (Alfred Tarski). 4.
La sinrazón de las matemáticas Paradoja
perdida y paradoja recuperada (Edward Kasner y
James R. Newman); Crisis de la intuición (Hans
Hahn). 5. Cómo solucionarlo Cómo
resolverlo (G. Polya). 6. El vocabulario de
las matemáticas Nuevos nombres para lo
viejo (Edward Kasner James R. Newman). 7.
Las matemáticas como arte Las matemáticas
como arte (John W. Navin Sullivan). 8 El
matemático Apología del matemático (G H.
Hardy); Invención matemática (Henri Poincaré); El
matemático (John von Neumann).
Volumen
sexto 1. Máquinas matemáticas. ¿Puede
pensar una máquina? Teoría general y lógica
de los dispositivos automáticos (John von
Neumann); ¿Puede pensar una máquina? (A. M.
Turing); Una máquina de jugar al ajedrez (Claude
E. Shannon). 2. Las matemáticas y el arte de
la guerra Las matemáticas y el arte de la
guerra (Frederick William Lanchester); Cómo
localizar un submarino (Phillip M. Morse y George
E. Kimball). 3.Teoría matemática del
arte Matemáticas de la estética (George
David Birkhoff). 4. Las matemáticas del
bien Una aproximación matemática de la
ética (George David Birkhoff). 5. Las
matemáticas en la literatura Budín cicloide
(Jonathan Swift); El joven Arquímedes (Aldous
Huxley); Geometría en el sur del Pacífico (Sylvia
Townsend Warner); Lógica inflexible (Russell
Maloney); La ley (Robert M. Cuates). 6.
Matemáticas y música Matemáticas de la
música (Sir James Jeans). 7. Las matemáticas
como clave cultural El significado de los
números (Oswald Spengler); El lugar de la realidad
matemática: una referencia antropológica (Leslie
A. White). 8 Entretenimientos, rompecabezas,
fantasías Colección de paradojas (Augustus
de Morgan); Flatland (Edwin A. Abbott); Lo que la
tortuga dijo a Aquiles y otros acertijos (Lewis
Carroll); La palanca de Mahoma (R. Courant y H.
Robbins); Pasatiempos del pasado y del presente
(Edward Kasner y Jamnes R. Newman);
Reconstrucciones aritméticas (W. W. Rouse Ball);
Los siete sietes (W. E. H. Berwick); Matemáticas
sencillas y tenis sobre hierba (T. J PA.
Bromwich); Matemáticas para jugadores de golf
(Srephen Leacock); El sentido común y el universo
(Stephen Leacock).
(Reseña aparecida en la
revista SUMA nº 35, Nov-2000) |